CONVICCIONES FUNDAMENTALES

         Siguiendo las orientaciones de Juan Pablo II relacionadas con la formación de los laicos, queremos retomar y hacer nuestras tres convicciones que “ se revelan especialmente necesarias y fecundas en la labor formativa”.

1. “ Antes que todo, la convicción de que no se da formación verdadera y eficaz si cada uno no asume por si mismo la responsabilidad de la formación”.

2. “ La convicción de cada uno de nosotros es el término  y a la vez el principio de la formación. Cuanto más nos formamos, más sentimos la exigencia de proseguir y profundizar tal formación; como también  cuanto más somos formados, más nos hacemos capaces de formar a los demás.

3. Es  de particular importancia de que la labor formativa, al tiempo que recurre inteligentemente a los medios y métodos de las ciencias humanas, es tanto más eficaz cuanto más  se deja llevar por la acción de Dios.

            El proceso que iniciamos, es una oportunidad para el crecimiento personal, del cual cada uno es el principal responsable, abierto siempre a la acción del Señor en nosotros. Aprenderemos para servir mejor y ayudar a otros a encontrar y a vivir su vocación y misión con intensidad y compromiso. Juntos trabajaremos en medio de los que nos rodean, porque en ellos está presente el mismo Dios.

           

            Es necesario recordar que la Escuela de Evangelización permanente, como pequeña organización eminentemente laical  está al servicio de todos aquellos que quieran conocer y poner en práctica las orientaciones de  la Nueva Evangelización. Por tanto, a lo largo de todo el curso brindaremos la ayuda que sea necesaria para que su aprendizaje sea efectivo y le ayude a vivir más intensamente y con mayor compromiso su seguimiento de Jesús, en su realidad concreta y en este momento histórico que nos a correspondido vivir.

“PARA QUE SE DE UNA PASTORAL VERDADERAMENTE INCISIVA Y EFICAZ HAY QUE DESARROLLAR LA FORMACIÓN DE LOS FORMADORES, PONIENDO EN FUNCIONAMIENTO LOS CURSOS OPORTUNOS O ESCUELAS PARA TAL FÍN”.

Juan Pablo II

 Christifideles Laici # 63

“Un Laicado, bien estructurado con una formación permanente, maduro y comprometido, es el signo de Iglesias particulares que han tomado muy en serio el compromiso de la Nueva Evangelización”

Santo Domingo # 103